Son noches de cafés interminables, de caritas largas aburridas y cansadas pero que han cumplido sus expectativas y también las nuestras.

Son noches de cafés interminables, de caritas largas aburridas y cansadas pero que han cumplido sus expectativas y también las nuestras.

Cada vez sois más las personas que me preguntáis acerca de detalles con los que alegrar tras tanto esfuerzo realizado, algo que le recuerde que el esfuerzo mereció la pena y que todo trabajo bien realizado conlleva una recompensa, algo que les recuerde que lo han conseguido y lo han merecido.

A mí en este caso  me encantan los pequeños colgantes o lindas pulseras, aunque hay un montón de bonitos detalles con los que sorprender.

Hay regalos que quedan en la memoria para siempre y el vínculo afectivo con una joya es para toda una vida.

Marina García